18 septiembre 2018

Dinámica equivocada

Me doy cuenta de que siempre entro en la misma dinámica cuando empiezo a establecer lazos de afecto con una comunidad nueva. Primero me esfuerzo lo indecible por mantenerme al margen, por dejar que les demás lo hagan todo y no crean que yo quiero quitarles protagonismo. Además de que no quiero involucrarme emocionalmente para luego no pasarlo mal. Después me siento en la obligación de abrirme porque otres también se abren conmigo. Se crean vínculos. Más tarde se les acaba la paciencia con mis activismos, a nadie le gusta que se le señale sus privilegios y su parte opresora. La confianza da asco en todos los sentidos. Por mi parte porque empieza a quemarme que me vayan demostrando que no se están molestando ni un poco en informarse y revisarse, por la otra parte porque sin darse cuenta se desmelenan y muestran lo que tienen dentro más allá de los formulismos bien-queda. La situación termina estallando, unas veces se intenta recuperar para luego estallar del todo, otras veces a la primera es definitiva. Como suelo ser la última en llegar, la gente del grupo no se posiciona de mi parte y me abandona. También es que a esas alturas yo se lo pongo fácil haciéndome odiable. Y de vez en cuando alguien me dice por detrás que no todes están en contra en mía, que algunes me entienden y me dan la razón, pero no siento el apoyo del grupo en absoluto. El grupo arropa a la otra parte y yo me alejo definitivamente porque no quiero forzar ningún enfrentamiento, porque no quiero obligar a nadie a elegir, porque de pronto siento que no soy bien recibida ya que si yo estoy la otra parte sufrirá lo indecible y ya ha dejado de importar lo que yo sienta. Es un problema que tengo, que no voy llorando por los rincones, que me escondo en la rabia y la razón para no centrarme en el dolor que me produce una nueva traición o un nuevo abandono. Y esa ha sido mi historia siempre. Sin duda es culpa mía. Porque me ha ocurrido tantas veces en tantos grupos distintos que no puede ser que la culpa siempre la tengan les demás. Tal vez sea que me muestro tan autosuficiente que me creen capaz de aguantar lo que me echen. Tal vez sea que ataco mucho cuando me siento dolida en lugar de echarme a llorar. Tal vez sea que creo una coraza tan gorda que nadie se atreve a acercarse. O tal vez sea simplemente que yo no nací para vivir en comunidad. Suelo ser más feliz cuando estoy sola. Quizás porque haya sido así siempre, o quizá porque es lo que menos me duele. No me compensa una decepción tras otra, un dolor tras otro. No me compensa porque al final la que siempre está sola comiéndose sus lágrimas sin un hombro sobre el que llorar soy yo. Que sí, que muy probablemente la culpa sea mía, pero os juro que ahora mismo lo único que quiero es ser capaz de una puñetera vez de no volver a sentirme parte de un grupo para darme cuenta después que todo fue un espejismo. Y si no soy capaz de poner distancia, no volveré a acercarme a ningún grupo, o me alejaré en cuanto note que soy bien recibida. Antes de que me lo vuelva a creer.

17 septiembre 2018

Trans*. Diversidad de identidades y roles de género

Me había perdido este libro que ha editado el Museo de América en colaboración con Chrysallis, y que hace un paseo por otras culturas, antiguas y actuales, que no se regían o rigen por el binarismo absurdo occidental de mujer-coño-principio sagrado femenino y hombre-polla-principio sagrado masculino: "Trans*. Diversidad de identidades y roles de género" (está al final del todo de la página, ahí hay un enlace en verde clarito que pone "Descargar aquí")
Tan difícil es entender que lo que se adoraba en el Paleolítico eran los principios sagrados gestantes y fecundantes, que lo de femenino y masculino se lo hemos puesto nosotres? Tan difícil es adaptar estos conceptos a vuestras creencias? Dónde está ese cambio del que tanto se habla en las tradiciones paganas? Tanto miedo os da? Porque no soy sacerdotisa, pero ganas me da para iniciar una tradición que realmente incluya toda la diversidad sexual.
Cuando pongo este tipo de publicaciones en mi cuenta pagana, donde el 90% de mis amistades son paganas, no contesta nadie, ni un me gusta ni un me disgusta ni nada. A las demás publicaciones sí, pero a las que cuestionan el femenino y el masculino, no. De hecho ni entran a las que hablo sobre transexualidad, transfobia o cisexismo. Pa'fliparlo, eh?